DESPERTANDO

Soñé.

Lamento no haberlo disfrutado.

El desenlace hubiera sido el mismo.

Estúpido.

Sabiendo que despertaría, no disfruté mi sueño.

Ahora quiero un poco más de él. Imposible.

Ya no dormiré, pues, otros serán mis sueños.

No me importa equivocarme.

Andaré por el mundo en vela, hasta que muera.

Aunque muerto esté por no soñar.

Y previa a la muerte, la locura será mi consuelo.

Sonreiré una última vez idiotamente.

Veré luz entre las sombras y alas sobre mi espalda.

Entonces, en la plenitud de mi locura, me lanzaré al vacío, tan loco y tan dormido que quizá sobreviva.

Yo no escribo estos relatos, pero son tan bonitos, que merece la pena leerlos. Un beso a todos.

0 comentarios: